lunes, 22 de febrero de 2016

UN MODO CUALQUIERA DE GANARSE LA VIDA


 

-Quiero ser equilibrista – le respondí a mi padre cuando, cumplidos los dieciocho, me preguntó hacia dónde quería dirigir mis pasos.

Puso cara de póker y me dijo que no fuera tonta, que estaba hablando de estudiar, de tener una profesión. Le contesté entonces con la mejor de mis sonrisas que quería ser jinete y correr en las carreras de caballos, esas que tanto le gustaba a él ir a ver al selecto club al que pertenecía. De nuevo no le pareció bien mi decisión y de nuevo tuve que pensar en mi futuro.

-Pues.... seré cantante de canciones infantiles, como El patio de mi casa, Susanita tiene un ratón y todas esas.

Papá ya estaba cabreado y a mi me encantaba verlo así. Siempre fui una rebelde y disfrutaba provocándole. Al final todo se quedó en tablas. Estudié Magisterio por estudiar algo y ahora trabajo en un circo haciendo equilibrios al lomo de un caballo mientras canto alguna canción, infantil o no, da lo mismo. Es mi modo de ganarme la vida y me hace feliz, aunque papá opine que no estoy en mis cabales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario